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PARTE I
Un legado forjado por visionarios y pioneros
El legado de RIMOWA comienza en 1898, cuando Paul Morszeck abre su primer taller en el 16 de la calle Bechergasse, muy cerca de la catedral de Colonia. Con el tiempo, esta guarnicionería pasó a fabricar maletas a medida, a base de contrachapado y cartón revestidos de cuero, para profesionales que necesitaban viajar.
Para satisfacer a una clientela cada vez más cosmopolita, Paul Morszeck hace evolucionar su negocio. A los baúles y maletas tradicionales, se suman cajas y estuches más pequeños y resistentes adaptados a los nuevos modos de vida de los viajeros.
Durante este período, Richard Morszeck, hijo de Paul, se une a la empresa, manteniendo la misma visión innovadora que su padre. Aprovechando los albores de la aviación, este ve en el aluminio el material ideal para crear maletas ligeras.
Maletín Hammerschlag de archivo
Símbolo de modernidad y resistencia, la maleta de aluminio soporta los rigores del viaje como ninguna otra, lo que la convierte en un valor seguro para exploradores y viajeros exigentes.
Baúl guardarropa de archivo
La compañía abrevia su nombre para adoptar el de la marca actual, RIMOWA.
(RIchard MOrszeck WArenzeichen*)
* Warenzeichen = Marca comercial
En 1950, RIMOWA añade a su carcasa de aluminio las ya icónicas estrías: instaura así un elemento de diseño que sigue siendo hoy un sello distintivo de la marca.
Estuche de cámara resistente al agua, 1978
Continuando con el legado familiar de innovación, Dieter Morszeck, hijo de Richard, se incorpora a la empresa. En 1978, marca un hito al crear la primera funda impermeable para cámaras, revolucionando la industria de materiales destinados a profesionales del cine y de la fotografía.
Siempre atento a las necesidades cambiantes de los viajeros, e impulsado por su espíritu innovador, Dieter Morszeck crea la maleta de policarbonato en el año 2000. Al reducir el peso y aumentar la resistencia, este nuevo material establece un nuevo estándar en la industria del equipaje, influyendo rápidamente en el resto del sector.
La marca amplía su gama y apuesta por una mayor versatilidad incluyendo bolsos de viaje y de uso diario destinados a satisfacer todo tipo de movilidad. Estos artículos polivalentes complementan a la perfección las colecciones de maletas de RIMOWA.
Las primeras maletas con las ranuras distintivas de RIMOWA se fabrican en 1950. Estas icónicas ranuras, inspiradas en la edad de oro de la aviación y en los primeros aviones totalmente metálicos, se convertirían en un rasgo característico de la marca y establecerían las claves básicas del diseño de RIMOWA para todas las categorías de productos.
El monograma es un reflejo de la elegante estética de RIMOWA, inspirado en las curvas suaves de nuestras maletas.
Los dos vértices de la marca representan las icónicas agujas de la catedral de Colonia, un guiño a nuestros orígenes alemanes.